La batería solar es el centro de la instalación solar fotovoltaica encargada de almacenar la energía. Dado que, permite consumir en el momento en el que no existe producción, logrando así solucionar el problema de la alternancia en lo que respecta a la generación de energía solar. Es de saberse que las baterías solares no tienen validez para una misma instalación. Por ello es importante conocer las prestaciones de cada tipo de batería para adaptarla a las necesidades de cada uno.
¿Qué tipos de batería solar se pueden conseguir?
Hay varios tipos de baterías que se pueden encontrar en el mercado. A continuación, se describen según su formato y tecnología empleada en la fabricación:
Según su formato
Baterías monoblock
Son baterías pequeñas que constan de una sola pieza y son parecidas en tamaño a las que se usan para los autos. Poseen menor capacidad de acumulación, por tanto, tienden a durar menos que en el caso de las baterías estacionarias. Por tanto, se recomiendan para instalaciones con un consumo bajo.
Baterías estacionarias
Estas baterías son grandes y poseen módulos de 2 V, siendo necesario unirlas a 6 elementos o vasos para formar los 12 V. Tienen la capacidad de almacenar mayor cantidad de energía y especialmente duran más tiempo.
Con base en ello, se puede notar que las baterías se diferencian conforme al consumo en pequeñas (monoblock) y grandes (estacionarias). En caso de que se quiera una batería para consumo bajo y con alternativa para ampliar en unos años, es recomendable conseguir una batería monoblock.
Según tecnología empleada en la fabricación
Las baterías también se pueden encontrar clasificadas según la tecnología empleada en la fabricación en:
Baterías de plomo-ácido abiertas (monoblock o estacionarias)
Estas baterías requieren mantenimiento anual del nivel de electrolito, cuando ocurren evaporaciones. Pues, al existir evaporación de gases no es posible instalarse en lugares con ausencia de ventilación.
Baterías AGM (monoblock)
Se encuentran fabricadas con un separador especial, específicamente, a base de fibra de vidrio absorbente. El electrolito es agregado en una cantidad controlada para conseguir que el separador pueda absorberlo. En este caso, no se requiere mantenimiento, en cuanto a este nivel de electrolito, dado que, se encuentra retenido en la fibra de vidrio. Al respecto, se consideran baterías selladas y que no tienen una alteración por evaporación, por ello, se recomiendan en lugares cerrados sin ventilación.
Baterías GEL (monoblock o estacionarias)
En el caso de estas baterías, el electrolito se encuentra contenido en un gel de sílice especial, a través del cual se ingresa el grupo de placas. Es por esta razón que también se consideran baterías selladas como en el caso de las anteriores, y no requieren de mantenimiento.
Pero, este tipo de batería sufre a temperaturas extremas, incrementando el volumen del gel con altas temperaturas. Esta acción provoca mal funcionamiento del equipo. La batería gel es ideal para aquellas instalaciones donde existe la disponibilidad de energía antes que de potencia.
Se debe tener presente que, en el caso de las baterías selladas, GEL y AGM, disponen de un índice de autodescarga demasiado bajo. Esto quiere decir que, conservan la energía durante un tiempo, así no se estén usando. Esto se convierte en una ventaja ante las AGM en comparación con las baterías de plomo-ácido abiertas que se encuentran en formato monoblock, que se pueden usar en instalaciones donde no existe un consumo diario.
¿Cuánto duran las baterías de una instalación fotovoltaica?
Depende exclusivamente de la cantidad de ciclos que la batería solar puede llegar a soportar. La cifra puede variar, aunque lo normal es que pueda llegar a desecharse cuando pierda más de un 20% de la capacidad que tienen originalmente. Un ejemplo de ello, se puede ver en el caso de las baterías de plomo-ácido, que poseen cerca de una vida media de 1,500 ciclos de carga y descarga. Mientras que, aquellas de litio de la misma capacidad puede ocupar alrededor de 5,000 ciclos.
¿Cómo elegir la batería fotovoltaica idónea?
Existe un conjunto de aspectos importante a tener en cuenta a la hora de adquirir una batería fotovoltaica, con el fin de elegir la mejor alternativa. Entre ellos se encuentran:
- Según el uso que se le desea dar. Pues no será lo mismo usar una batería para paneles solares para casa a diario que de forma esporádica en otra vivienda.
- Fija o portátil. En el caso de las baterías solares fijas tienen un rendimiento eficiente y mayo capacidad. A pesar de esto, tienden a ser muy pesadas y requieren estar ubicadas en un solo espacio. Pero, es posible conseguir alternativas más ligeras y que sean de fácil traslado, según las necesidades que se tengan.
- El precio de las baterías fotovoltaicas está fijado, según la capacidad que poseen, la vida útil y la velocidad de descarga.
- Si por falta de tiempo, conocimiento o medios no se puede realizar el mantenimiento correspondiente a este equipo, lo mejor será optar por las AGM, las de litio o las estacionarias. Dado que, las demás baterías solares ameritan controlar y regular los niveles de electrolitos.
- Las baterías para el caso de las placas solares más pequeñas son de aproximadamente 2 V y las más grandes son de 48 V o más. La diferencia en este aspecto varía notablemente, es por ello que, es conveniente saber cuáles son las necesidades que se posen para la instalación antes de adquirir un equipo de esta categoría.
Rayssa, expertos en energía solar
Somos líderes en paneles solares. Nos especializamos en la venta de paneles solares en Chile y todos los componentes para que produzcas tu propia energía. Disponemos de una cobertura amplia, y contamos con financiamiento de hasta 48 cuotas en productos seleccionados. Sujeto a evaluación crediticia.
Si desean conocer más sobre paneles solares o batería solar, pueden contactarnos a la línea +56 (967) 885 564, a través de nuestro correo electrónico ventas@rayssa.cl o llenando nuestro formulario directamente en el sitio web.
